miércoles, 27 de enero de 2010

EL RESPETO POR EL TRABAJO DE LOS DEMÁS




Fuente: Dallys Kara de Palma.

Cuando decimos que las personas no respetan a otras, estamos hablando de la irrupción al espacio que necesitamos todos y esto incluye compañero(a)s de trabajo, hermano(a)s, esposo(a). Sin embargo, queremos ser tratados con respeto pero para poder exigir ese respeto es necesario mirar hacia nuestro interior, Insistimos que hay que reflexionar, pensar si realmente existe un interés muy particular en ese actuar y con qué corazón realizamos la tarea diaria ya sea en el trabajo como en las otras actividades que giran en torno a los diferentes compromisos que giran en nuestro quehacer diario.

Vamos a partir de la premisa que somos personas con un coeficiente normal de inteligencia, pero todos los seres humanos no tenemos el mismo temperamento, mucho menos la fórmula para que todos nos comportemos de igual forma. Y es que pensamos que en todos los tiempos a pesar de que existen teorías sobre el comportamiento organizacional, el hombre es tratado como un robot, una máquina, incapaz de percatarse que está ocurriendo a su alrededor.

Hoy se habla mucho del trabajo en equipo, de la importancia que tiene el distribuir una carga de trabajo equitativamente, se entiende con esto que un trabajo repartido entre varios colaboradores es más fácil de realizar, que una tarea concentrada en un minúsculo grupo.

Para encontrar que no existe la persona promedio,(1) que todos somos diferentes, por lo tanto respetemos las diferencias individuales, el deseo de involucramiento, la percepción y finalmente el valor de las personas (2). Según lo que venimos comentando, trabajar en equipo puede ser interesante, toda vez que entramos a compartir con los que conforman en ese momento el grupo.

En las instituciones del siglo veintiuno, con los cambios que se presentan de manera rápida, la globalización, el modernismo y el consumismo, todo esto llega a los centros de trabajos, muchas veces caemos en la murmuración y la sátira, pudiendo esto de alguna forma influir en los que están a nuestro alrededor. Para esto apelamos a que el lector se involucre con la Ventana de Johari, siendo los creadores Joseph Luft y Harry Ingram quienes nos invitan hacia ese mirarnos hacia dentro: El área abierta, el área oculta, el área ciega y el área desconocida (Rafael Guizar Montufar Desarrollo Organizacional, México- 2008) Tanto a nivel grupal, personal e institucional a través de la Ventana de Johari podemos identificar con los que nos motiva, nuestras percepciones, sentimientos y de más.

El ser humano nunca acaba de aprender y aunque cada quien tiene su propia forma de pensar y por ende de actuar, recordemos lo que sabiamente nos dice un proverbio chino: "del hablar mucho viene el arrepentimiento, en el silencio está nuestra seguridad". El ser humano en ocasiones es irreflexivo y al no frenar la lengua, habla sin tino, no se mide, no toma para nada las consecuencias de la palabra proferida que una vez lanzada no se puede recoger.

Creemos realmente que para vivir en sociedad necesitamos ante todo respetar las diferencias individuales. Esta es nuestra percepción. ¿Qué piensa usted?.

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