Siempre he admirado la figura de San Francisco de Asís y eso por un doble motivo: Vivió de manera radical el Evángelio y por el otro lado lo hizo sin salirse de la Iglesia. Para ello se equipó de bastante dosis de Pobreza y de humildad, considerando a los otros más que así mismo y viendo en el projimo, en la naturaleza etc. la presencia de Dios.
Hoy nosotros los cristianos vivimos en un mundo totalmente relativista, materiasta y donde cada uno va a lo suyo. Lo peor de todo esto es que se instale en nosotros la mediocridad, contentadonos con ir tirando...el cristianismo fue siempre un camino exigente, donde cristian@s derramaron su sangre por cristo, un camino de seguimiento del Señor, no unicamente cultual y sin arraigo en la vida de todos los días.
Los sant@s son aquellos valientes, decididos a salir de su mediocridad y que en algunos casos pasaron de una vida totalmente pecadora a otra de verdadera unión con Dios y de servicio a los demás. Es lo que en Cristiano se llama conversión. ¿Cuántos han o hemos llegado a esta vivencia de tener que cambiar?.¿Que valor es cristo para nosotros ? O ¿Solamente vivimos un cristianismo social?.
Es necesario recuperar nuestro Cristianismo como Vocación. (Llamada) de todos los Bautizados y que se expresa en la vivencia de la Fe en nuestros hogares y comunidades Parroquiales y esto en ese espirítu de Francisco: Desechando toda soberbia, maledicencia y acogiendose a la pobreza, a la humilidad. Solo así el Señor puede hacer obras grandes en cada uno de nosotros. Ser cristianos es para los “Pobres en espíritu”...”los sufridos”...”los que lloran”...”los que tienen hambre y sed de justicia”... y de ese modo son “Dichosos los misericordiosos”...”Los limpios de corazón”...”Los que trabajan por la paz”...”Los perseguidos a causa de la justicia”... Lo importante es saber que Dios no se olvida de sus hijos y que trabajamos en un proyecto de eternidad.
La Santidad no es algo ñoño o pasado de moda...es la realidad a la cual estámos llamados a ser todos nosotros...¡encarnemos nuestro cristianismo y expresemoslo en nuestra sociedad¡.
Hoy probablemente el Señor no pida nuestra sangre , pero si que nuestro testimonio de fe sea PUBLICO, que no tengamos vergüenza de ser cristian@s y esto será una realidad en nosotros si sabemos “de quién nos hemos fiando”...Del Señor. Esto implica (que dentro de lo humanamente criticable de nuestra Iglesia)debemos sentirnos orgullos de permanecer A ella y de colaborar en lo que podamos hacer en cada una de nuestras Parroquias, que están unidas a nuestro Obispo y al Papa. Ejercicio de Común-unión.
Muchos comentarios de la Iglesia se hacen en los medios de comunicación Social y en tertulias taberneras sin respecto y sin conocimiento de causa, es decir faltando a la más elemental norma de justicia y de verdad.
Francisco de Asís entendió su vida en clave de conversión. Pero primeramente empezando por el mismo. Nosotros a veces señalamos que ese cambio es primeramente para los otros y despues “ a mi”...proyectando la deficiencia , el fracaso personal en el otro.
La conversión es el estado permanente del cristiano hasta el momento de la muerte. ¿O es que no tenemos y vivimos la experiencia de ser pecadores?, ¿de que todos los días nos equivocamos?. También de la gracia que Dios siempre nos da Y sostiene.
Que Dios nos de un corazón de pobres, unas manos para servirlo y una boca para alabarlo. Nuestra felicidad no depende de lo material y de lo que va pasando...”tenemos hambre de Dios y de eternidad”. Dios quiera que sea así, de lo contrario tendremos un problema.
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